Ballet
El Sombrero de tres picos
El sombrero de tres picos es un ballet del compositor español Manuel de Falla y coreografía de Léonide Massine, basado en la novela de Pedro Antonio de Alarcón y con decorados y figurines de Pablo Picasso.
Falla, Massine y Picasso llevan a cabo una adaptación en que conviven elementos clásicos con otros más modernos. Así, el vestuario, creado a partir del tradicional del siglo XVIII, de inspiración goyesca, incluye elementos que le dan un aire renovado .
La escenografia de Picasso rinde también homenaje a toda la tradición pictórica española, como prueban sus referencias a Goya y el hecho mismo de elegir una corrida de toros para el telón de presentación. Además, sus vestuarios recrean toreros y bailarinas vestidas de sevillanas, mallorquinas o aragonesas, en homenaje a la diversidad hispana.
Queda plasmado el gusto de los tres artistas por la cultura popular. Se trata, en definitiva, de una apuesta por la inclusión del folclore español en el ballet.
El sombrero de tres picos fue estrenado por los los “Ballets Russes” de Diaghilev el 22 de julio de 1919 en el Alhambra Theatre de Londres bajo la batuta de Ernest Ansermet
La jota final es uno de los números más conocidos de la obra.
Tras su estreno en Londres, la obra tuvo un rotundo éxito, elogiándose la acertada síntesis de música, baile, drama y decorado.
Falla escoge sus temas musicales de la música popular española y se inspira en fuentes tan diversas como la canción popular murciana, el fandango andaluz, la jota, y hasta en temas infantiles.
Los personajes son caracterizados por temas y timbres específicos.
Para identificar al Molinero, murciano, Falla utiliza un tema de sus "siete canciones populares"«El paño moruno», procedente de Murcia; la Molinera, navarra, es caracterizada por un tema de jota; las apariciones del Corregidor son anunciadas por el fagot que hace resaltar su carácter grotesco; una cita caricaturesca del motivo inicial de la Quinta sinfonía de Beethoven («motivo del destino»), tocado por las trompas con sordina, representa a los Alguaciles llamando a la puerta del Molinero al que vienen a arrestar.
Picasso fue quien dio a Falla, la idea de introducir la voz humana en el ballet. A Falla le pareció buena idea este efecto muy típico, añadir la voz humana en algunos momentos; pero sin cantar,sólo con gritos, olés, etc. dados por los propios bailarines. En definitiva, serán los músicos de la orquesta los que griten los olés acompañados de palmadas.
Se desarrolla en dos cuadros representados con las siguientes piezas dancísticas:
Cuadro primero
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Introducción
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La Tarde
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Fandango (Danza de la Molinera)
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El Corregidor
Cuadro segundo
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Seguidillas (Danza de los Vecinos)
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Farruca (Danza del molinero)
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Las coplas del cuco
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Minué (Danza del corregidor)
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Danza final (Jota)